Pablo Neruda
a 100 años de haber empezado a escribir
bajo el pseudónimo
de Neruda
Para algunos que lo conocieron, especialmente para aquéllos que compartieron con él la lucha contra la miseria y la opresión de los pueblos, Pablo Neruda gozó del carisma excepcional de aquellos elegidos a quienes encaja como un guante la palabra ejemplo; pero para la mayoría de los lectores que no gozaron de la fortuna de su abrazo, el poeta será siempre aquel personaje tímido, invisible y agazapado que se ocultaba tras los barrotes horizontales y tenues de sus lindas canciones de amor.
Nacido en 1904 en Parral con el nombre de Ricardo Eliecer Neftalí Reyes Basoalto, Neruda se sintió durante toda su vida profundamente enraizado en su tierra chilena pese a haber llevado una existencia de viajero incansable.
Residiendo en Temuco, ingresó en el Liceo de la ciudad en 1910, y desde pequeño le encantaron las letras, para 1917 ya hacía versos para sus amigos y más aún después de conocer la célebre poetisa Gabriela Mistral, quien le había regalado algunos libros de Tolstoi, Dostoievski y Chéjov, decisivos en su primera formación literaria.
No obstante, su padre se oponía abiertamente a que siguiera esta vocación, de modo que cuando el 28 de noviembre de 1920 obtuvo el premio de la Fiesta de Primavera de Temuco, el joven poeta ya firmaba sus poemas con seudónimo, un ardid para desorientar a su progenitor. El nombre elegido, Neruda, lo había encontrado por azar en una revista y era de origen checo . . . . . lo demás es historia de viajes, poemas, reconocimientos y premios para un prolífico y reconocido escritor que nos dejó un enorme legado de conocimiento y reflexión en pequeñas frases.
Pablo Neruda (1904-1973)